Los Heraldos del Evangelio entre Stalin, Pilatos y Cauchon. Pero, ¿por qué?
20 Settembre 2021
Marco Tosatti
Queridos amigos y enemigos de Stilum curiae, recibimos y publicamos con gusto esta carta que recibimos, que nos da noticia de una medida inexplicable – si no en términos de hostilidad preconcebida – del Cardenal Braz De Aviz hacia los Heraldos del Evangelio. Una buena lectura.
§§§
LOS HERALDOS DEL EVANGELIO:
ENTRE STALIN, PILATOS Y CAUCHON.
PRO VERITATE
Il Manifesto, un periódico comunista, publicó recientemente una noticia bastante imprecisa sobre la injustificada “decisión” del Card. Braz de Aviz de expulsar a los menores que se hospedan en las casas de los Heraldos del Evangelio. La conclusión jubilosa a la que llegan los inofensivos camaradas es un deseo letal: “el próximo paso sería la supresión de los Heraldos”. Es decir, primero envían a casa a los menores, y después se cierra la Asociación.
Sin embargo, los hechos, no se corresponden con aquello que afirman los medios de izquierda; ni siquiera con las supuestas “comunicaciones” que habrían llegado a la mesa de Su Eminencia Aviz, y que serían la base de una decisión verdaderamente lamentable e inclemente a todos los niveles.
Siendo usted, estimado Tosatti, un periodista honesto, me valgo de su deseo de dar a conocer la verdad a la gente, y para hacer llegar a los lectores italianos, algunas precisiones sobre la medida inesperada e injusta de la Congregación para los Institutos de la Vida Consagrados y las Sociedades de Vida Apostólica con relación a los menores alojados en las casas de los Heraldos del Evangelio, que residen allí con el permiso y consentimiento entusiasta de sus padres, como se verá.
Hace algún tiempo expresé mi preocupación a los estimados estilumcuriales sobre la “Visita apostólica” y el “comisiaramiento” que había sido infligido a los Heraldos, sin que se hubiese demostrado ninguna de las sospechas levantadas contra ellos. De hecho, el sitio web de Vatican News, y el propio Mons. Carballo en una entrevista grabada, aclararon que en el caso de la Asociación, el ser comisariada no suponía un castigo. Aquí están las palabras precisas del arzobispo: “No es una punición, no es un castigo. Es simplemente una ayuda que la Iglesia, nuestra Madre, les ofrece ”(cfr. Rome Reports 12/5/2019). Ahora donde no hay pena no hay crimen. ¿Y por qué entonces el comisariamiento? Medidas misericordiosas, ahora ya frecuentes, en estos tiempos de fraternidad, amor, libertad y acogida…
Pero volviendo a nuestro caso, relativo a los menores expulsados contra su voluntad y contra la de sus padres de nuestras casas, debo decir que como canonista he estado en contacto con el Comisario (Card. Raymundo Damasceno Assis) y sus auxiliares e, incluso todos ellos, han expresado repetidamente su perplejidad acerca de ciertas actitudes autoritarias de su Eminencia Aviz, en claro contraste con la constante enseñanza del Pontífice, reiterada recientemente en Bratislava sobre la aventura de la libertad, la necesidad de evitar que todos piensen lo mismo y obedezcan ciegamente.
Además, en la larga estela de esta extraña forma de conducir la persecución contra los Heraldos del Evangelio, la reciente “Decisión” de Su Eminencia Aviz, respecto a los menores, incluye, con toda desfachatez, innumerables errores formales, canónicos, de derecho común, de derecho natural e incluso de Derecho Divino, capaces de dejar boquiabiertos a simples alumnos de una Facultad de Derecho, como también a juristas destacados, como mostraré a continuación.
Pero, antes de todo deberíamos preguntarnos: ¿qué es lo que dice el Decreto?
El Decreto es verdaderamente particular, porque in primis impone al comisario de actuar contra la Asociación y contra las familias sin haber escuchado antes su opinión. En cierto modo, el comisario es comisariado, considerándolo tal vez poco eficiente o, incluso un inútil. Aquí está el primer abuso de autoridad del Eminente Aviz.
La motivación de la medida disciplinaria sería múltiple y se basaría en “numerosas comunicaciones” (el término “acusaciones” o “denuncias” no se utiliza intencionadamente, tal vez para evitar el deber de otorgar el derecho de defensa al imputado) llegadas a la Congregación de presuntos padres de niños y jóvenes inseridos en los Heraldos de Evangelio, en las que constarían las siguientes quejas: 1. Las familias serían excluidas de la vida de sus hijos, y el contacto entre padres e hijos sería insuficiente; 2 La disciplina excesivamente rígida impuesta a los menores; 3. La necesidad de prevenir posibles abusos de conciencia y plagio contra menores (por lo tanto ¡reconoce que, desde los comienzos hasta la actualidad no ha existido!).
Y la medida concreta a ser tomada sería: “los menores residentes en las casas, escuelas, internados de la Asociación, al finalizar el año escolar deben volver a vivir con sus familias y ser confiados a sus respectivos padres “. Con estos supuestos podemos analizar el “monumento” de jurisprudencia y “maternidad” eclesial elaborada por la Congregación de Religiosos.
En primer lugar, uno se pregunta el por qué del secreto de las pruebas.
Conociendo bien al Eminentísimo Aviz, se puede suponer que si hubiese cualquier cosa de escandaloso ya lo habría hecho filtrar a sus periódicos favoritos, es decir, los de tendencia marxista, como ha sucedido en otras ocasiones, aunque siempre las infundadas acusaciones fueran posteriormente desmentidas por los Heraldos.
Entonces, ¿en qué consistirían tales “comunicaciones”? ¿Quién las envió? ¿Cuál es su verdadero contenido? ¿Cuántas son en concreto? Nada se puede saber, es secreto de cardenal, sólo el Eminente Aviz tiene derecho a conocerlo. Y así, desgraciadamente, los otros tienen que sufrir sanciones por la fuerza de su secreto, sin poder defenderse.
La imposición autoritaria del Prefecto recuerda el dicho del león en la fábula de
Fedro: Tengo razón, dice, “nominor quia Leo”, porque soy el León …
¡Vaya expertos jurídicos que tenemos en esta ilustre Congregación! ¿verdad? Lástima que se hayan olvidado del adagio “ut audiatur et altera pars”, principio elemental del Derecho, incluso invocado por Nicodemo ante el Sanedrín que quería condenar a Jesús: “¿Acaso nuestra ley juzga a un hombre sin haberlo escuchado antes y sin saber lo que hizo?” (Jn 7,51)
De hecho, alguien con sentido común podría preguntarse: ¿los Heraldos, acusados, no tienen derecho a defenderse? ¡Qué va! ¡Ni hablar! Son conservadores, para ellos la sospecha ya es una condena. ¿Estaremos así frente a un nuevo episodio anacrónico y grotesco de la “ley de los sospechosos” de la infame Revolución Francesa? La Congregación tiene la palabra…
Refutar las asombrosas acusaciones contra la formación otorgada por los Heraldos a
los menores de edad que se les encomiendan, le corresponde a las verdaderas familias de los niños que se alojan en nuestras casas, porque en realidad, entre las “numerosas comunicaciones” recibidas en manos del Eminentísimo Aviz, ¿cuál realmente proviene de una familia que tenga un hijo menor de edad alojado en las casas de los Heraldos del Evangelio? ¿Podría por lo menos nombrar alguna familia? La Congregación tiene la palabra…
De hecho, los padres que tienen hijos hospedados por los Heraldos han promovido con determinación y entusiasmo una colecta de firmas (ya van 2.583) dirigidas al Eminentísimo Aviz en la que piden con respeto y firmeza la suspensión del mencionado Decreto que consideran nulo por falta de fundamento, y por el hecho de lesionar sus derechos, es decir, la responsabilidad inalienable de los padres por la educación de sus hijos (c. 226); y la ley natural, amparada también por la legislación canónica, del derecho de estos niños y niñas mayores de 14 años a elegir su estado de vida (c. 219) y su camino espiritual (c. 214).
El Decreto “Avizino”, solo para darle un nombre para que pase a la historia como
“Espectro legal”, presume que los Heraldos casi que han secuestrado a los niños ya que deberían devolverlos a manos de sus padres… Gravísima acusación que, de no probarla, resultaría en una nefasta calumnia tanto contra los Heraldos, como contra los propios padres, considerados por el Cardenal irresponsables e incapaces.
Pero, ¿cuáles de los verdaderos padres de estos niños que se hospedan en nuestras casas actualmente han pedido la restitución de sus hijos? La Congregación tiene la palabra…
Además, si las “numerosas comunicaciones” fuesen inconsistentes, el Eminentísimo podría ser acusado del delito de falsedad conforme el c. 1390, que sanciona la calumnia como perjudicial para la buena reputación de los demás.
El mismo Cardenal Comisario, habiendo recibido la carta del Cardeal Braz de Aviz, declaró en un primer momento que no podría aplicar las decisiones de Roma porque no correspondían a la realidad de los Heraldos. De hecho, existe el c. 41 que ordena a cualquier ejecutor de un acto administrativo suspender la aplicación por su inoportunidad, nulidad y otras causas graves. Sin embargo, al final, la voluntad del Prefecto prevaleció: “Hoc volo, sic iubeo, sit pro ratione voluntas” (Esto quiero, así lo ordeno, sirva mi voluntad de razón”. (Juvenal).
El Card. Damasceno, entonces, decidió obedecer el “diktat” promulgando una especie de decreto de aplicación del Decreto “Avizino”, en definitiva, como se ve, una obra maestra jurídica verdaderamente alucinante. Además, si en ocasiones Cardenal Comisario se había mostrado bastante sensato, esta vez, sin embargo, la pusilanimidad lo ha asemejado un poco al pretor romano Poncio Pilato: “No encuentro ninguna falta en este hombre ”(Lc 23,4) pero…
Así que nuestro Comisario, aunque consciente de la inocencia de los Heraldos se ha lavado las manos, porque el Eminentísimo Aviz ¡ha decidido lo contrario! Por tanto, debemos desobedecer a Dios para poder obedecer al hombre, ¡y qué hombre!
Al margen de todo esto preguntamos: ¿cómo puede el Eminentísimo Prefecto afirmar, en su decreto, que existe el peligro de “abuso de conciencia y plagio contra menores”, y, al mismo tiempo ¿manda que las medidas de precaución sean tomadas “al final del año escolar”? Si estos menores estuviesen verdaderamente en peligro, ¿por qué habría que dejarlos otros seis meses en riesgo de sufrir “abuso de conciencia y plagio “?
Además, y digámoslo también de pasada, los juristas italianos saben que el delito de plagio, similar al abuso de conciencia, introducido por Mussolini en el Código Penal, fue declarado inconstitucional por la Corte Constitucional en 1981. Pero nada esto parece preocupar al Eminentísimo pues, una inconstitucionalidad más, o una menos ¿qué más da?…
El Decreto “Avizino” fue pues, notificado a los padres de las niñas y niños alojados en las casas de los Heraldos. Y ellos, como ya fue explicado, decidieron responder en defensa de sus legítimos derechos, contra el Cardenal revisionista de las normas anticonstitucionales. Dicen los franceses, “ce bette est très méchant, quand on l’attaque il se défend” – que podríamos traducir libremente: “¡estos padres de familia muy peligrosos, cuando se les ataca, se defienden!”
De hecho, los padres, reunidos en una Asociación, organizaron inmediatamente una recogida de firmas que, en pocos días, alcanzó una alta adhesión, como ya fue indicado arriba, en defensa de su libertad de educación, y la de sus hijos. Tal recogida fue protocolada en la Congregación de los Religiosos sin ninguna respuesta. Una vez más, la Congregación tiene la palabra…
Es más, destacados juristas brasileños, como los célebres Ives Gandra da Silva Martins y Dircêo Torrecillas Ramos, han elaborado, “sponte propria”, un parecer jurídico mostrando algunas de las graves ilegalidades contenidas en el ahora famoso Decreto “Avizino”. Este parecer está siendo difundido no sólo en Brasil sino también en los países donde los Heraldos colaboran con las familias para la formación cristiana de los jóvenes, y ha sido entregado tanto en representaciones diplomáticas, como en oficinas estatales de protección de menores, y en congregaciones romanas, además de haber sido enviado por los propios autores al Eminentísimo Aviz.
Un punto importante a señalar es que las mismas calumnias admitidas por el Eminentísimo Aviz como verdaderas – siempre promovidas por el mismo grupito hostil a los Heraldos – fueron presentadas como quejas formales en seis tribunales brasileños. Y, después de los procedimientos judiciales, todos los procesos, que eran seis, fueron sobreseídos, por falta de pruebas y falta de verosimilitud con la realidad.
Cómo es cruel constar que en el ámbito civil todavía existe el estado de derecho, mientras que, en la Iglesia, nuestra Madre, existe una especie de estalinismo implacable.
Pido a los amables lectores que oren por esta situación, pero especialmente, por las
víctimas más indefensas: los niños y niñas que residen en nuestras casas.
¡Cuántos de ellos tendrán que encontrarse en contextos de dura pobreza, de riesgo para su integridad, de precaria formación! No se puede describir la tristeza dibujada en los rostros de estos jóvenes entusiastas que ven su futuro cubierto de nubes oscuras y amenazadoras.
Pero, ¿tratarlos así injustamente no es rigidez? La Congregación tiene la palabra…. Pilato no quiso reconocer la Verdad y condenó sin pruebas al Justo. Después de él muchos otros a lo largo de la historia, han seguido sus pasos, como el obispo Cauchon y el Card. de Besufort que mandaron a la hoguera a la inocente Pucelle, Juana de Arco. Cuando Dios quiere, sin embargo, contra los “diktats” de Pilato, Cauchon, de Beaufort, Stalin y otros: “deposuit potentes de Sede et exaltavit humiles” …
Tenemos nuestra confianza depositada en Dios, nuestra fuerza, y en Nuestra Madre, María. Hacia Ellos levantamos la mirada y rezamos llenos de esperanza: “Gaude Maria virgo, cunctas haereses sola interemisti in universo mundo”.
¡Pro veritate!
José Manuel Jiménez Aleixandre, EP
Aquí proponemos la lectura del texto que acompaña a las firmas de los padres de los niños y niñas alojados en las casas de los Heraldos:
| RECOGIDA DE FIRMAS |
Al Eminentísimo Cardenal Don Raymundo Damasceno Assis,
Comisario Pontificio junto a la Asociación Privada Internacional de Fieles de Derecho Pontificio Heraldos del Evangelio.
Nosotros, padres y responsables legales de los estudiantes menores de edad que están alojados en las casas de los Heraldos del Evangelio, conscientes de la Decisión del Cardenal Braz de Aviz, la cual determina «que todos los menores de edad», «al final del año escolar en curso deben volver a vivir con sus familias y ser confiados a sus respectivos padres», manifestamos a V. Em.ª lo que sigue:
1 – El Cardenal Braz de Aviz, en la mencionada Decisión, afirma: «Considerando las numerosas comunicaciones aquí enviadas por los padres de niños y jóvenes que están dentro de la órbita de la Asociación Heraldos del Evangelio, en las cuales se lamentan de que las familias de origen son, en la mayoría de las veces, excluidas de la vida de sus hijos, y que el contacto con los padres no es suficientemente garantizado». Sin embargo, esas «comunicaciones» NO FUERON enviadas por NINGUNO de nosotros, los abajo firmantes, padres de los menores de edad que están alojados en las casas de los Heraldos del Evangelio, por deseo de nuestros hijos y con nuestro consentimiento, que somos los responsables legales; además, nosotros no nos sentimos excluidos de la vida de nuestros hijos, ni impedidos de tener contacto con ellos.
2 – También afirma que se practica una «disciplina excesivamente rígida» «en las comunidades de los Heraldos del Evangelio». Pero quien debe definir si le gusta o no esa disciplina – la cual, por cierto, no es excesivamente rígida – somos nosotros y nuestros hijos, según nuestros criterios y expectativas. En ningún momento nuestros hijos se han quejado con nosotros de esa disciplina, y ninguno de nosotros, padres de familia, ha dirigido al señor Cardenal reclamación alguna referente a la disciplina que se practica en los Heraldos del Evangelio.
3 – Más aún, la Decisión afirma que su finalidad es la de «permitir a los más jóvenes la indispensable relación con las familias», y que tiene «el objetivo de prevenir cualquier situación que pueda favorecer posibles abusos de conciencia y retención de menores de edad». Reiteramos que mantenemos con nuestros hijos unas excelentes relaciones, ellos no están abandonados, ni mucho menos carentes de cuidados osujetos a abusos. Tenemos un conocimiento total de la formación que los Heraldos del Evangelio dan a nuestros hijos.
Por lo expuesto anteriormente, preguntamos: si esas «comunicaciones» no partieron de nosotros, padres de los menores de edad que están alojados en las casas de los Heraldos del Evangelio, ¿tendría el Cardenal Braz de Aviz una preocupación verdadera por la educación y por el futuro de nuestros hijos, una vez que pretende decidir el destino de ellos, atropellando su voluntad igual que la de sus padres?
4 – Nos ampara el derecho natural, expresado en el Concilio Vaticano II: «Es preciso que los padres, cuya primera e intransferible obligación y derecho es el de educar a los hijos, tengan absoluta libertad en la elección […], según su propia conciencia, [de] las escuelas para sus hijos».[1] También nos apoya el Papa San Juan Pablo II, en el sentido de los documentos conciliares: «El derecho-deber educativo de los padres se califica como esencial […]; como original y primario […]; como insustituible e inalienable y que, por consiguiente, no puede ser totalmente delegado o usurpado por otros».[2]
De este modo, cuando la autoridad excede los límites de la competencia que le es propia y, sobre todo, cuando sus determinaciones son contrarias a la recta conciencia, «a los derechos fundamentales de las personas»,[3] es un deber no seguir esas prescripciones, pues «hay que obedecer a Dios antes que a los hombres» (Hch 5, 29).
5 – Puesto que la legislación canónica[4] también garantiza estos derechos y que la Iglesia Católica enseña que los padres «deben ser reconocidos como los primeros y principales educadores de sus hijos»[5] pues, «en virtud del ministerio de la educación los padres, mediante el testimonio de su vida, son los primeros mensajeros del Evangelio ante los hijos»,[6] no deja de escandalizar semejante actitud proveniente de autoridades eclesiásticas.
6 – Así, amparados también por la legislación civil, que garantiza el ejercicio de la patria potestad familiar, y respetando la voluntad y los anhelos de nuestros hijos, nos resguardamos el derecho de NO ACEPTAR ESTA INJUSTA IMPOSICIÓN. Y, caso sea necesario, apelaremos a la justicia civil para hacer valer nuestros derechos de padres y también el derecho de nuestros hijos.
Nosotros somos los padres y los responsables legales por la educación de nuestros hijos. APROBAMOS y deseamos que ellos continúen estudiando y recibiendo la formación de los Heraldos del Evangelio.
RESPETUOSAMENTE, FUNDAMENTADOS EN LA ARGUMENTACIÓN EXPUESTA, RECHAZAMOS Y NO PERMITIMOS QUE V. EM.A SE APODERE INDEBIDA E ILEGALMENTE DE NUESTROS DERECHOS.
Dado y firmado el 15 de agosto del 2021, Solemnidad de la Asunción de la Bienaventurada Virgen María.
[1] CONCILIO VATICANO II. Declaración «Gravissimum Educationis» sobre la educación cristiana, n.º 6. Ver también CCE 2229.
[2] SAN JUAN PABLO II. Exhortación Apostólica «Familiaris Consortio», n.º 36. Ver también CCE 2221.
[4] Cf. CIC c. 226 § 2; c. 793 § 1. Ver también c. 1136.
[5] PONTIFICIO CONSEJO PARA LA FAMILIA. Carta de los derechos de la Familia, art. 5.
[6] SAN JUAN PABLO II. Exhortación Apostólica «Familiaris Consortio», n.º 39.
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Categoria: Generale
Felicito al Sr. Tosatti por abordar el tema de manera totalmente objetiva, permitiendo conocer al lector la versión de los perseguidos, porque del análisis de los hechos no cabe otra definición para el atropello cometido con ese decreto, que ordena arbitrariamente y sin ningún fundamento legal la deportación de los menores de edad que vivan en los colegios que siguen el carisma de los Heraldos para la casa de sus padres.
Conozco hace décadas a los Heraldos y soy testigo de su integridad, virtud que parece incomodar hoy en esferas eclesiásticas.
Cómo padre de familia deseo esa santidad de vida para mi hijo, por eso es que me alegro enormemente su deseo de ser formado en ese ideal católico en un colegio con el carisma de los Heraldos. Los niños gustan de estar allí, nadie en esos colegios está obligado, y los padres damos la autorización para su permanencia con beneplácito.
Este abuso de autoridad del Cardenal Brazo de Avis clama al cielo por justicia
Excelente artículo Sr. Marco Tossati, la verdad, objetividad y claridad, son una prenda del gran valor de su jornal, la Virgen lo siga cuidando, y guiando, por defender esta obra de los Heraldos que es de Ella.
Son momentos apocalípticos, y momentos grandiosos! Vivan los Heraldos!
Gracias D. Marcos Tosatti. Excelente artículo.
Conozco a los Heraldos del Evangelio y a su fundador desde hace 23 años; lo que puedo y debo decir es que son una escuela de santificación para muchísimos jóvenes y familias enteras.
¿Cuál es la molestia? ¿será ver que Ud. Cardenal Bras de Aviz no puede ser lo que ellos son? ¿Le molesta saber que su decadencia espiritual y …moral? no le permite ser un verdadero PASTOR CON OLOR A OVEJA como pregona el Papa Francisco? ¿Por qué esa persecusión infame fundada en calumnias de unas cuantas personas prepagadas para hacer el mal? ¿Por qué no escuchar a los padres de familia y a los jóvenes formandos? ¿por qué inmiscuirse en lo que por derecho natural y divino le corresponde a los padres de familia?
Puedo seguir cuestionando su arbitrario procedimiento y decirle muchísimas cosas más; pero sea noble y fiel a la investidura que como Príncipe de la Iglesia ostenta; sea fiel a las enseñanzas de Nuestro Señor Jesucristo, que tal parece las ha engavetado y echado al olvido, destruyendo a diestra y siniestra lo que a usted le choca: la rectitud de corazón y pureza de intención, la disciplina, la santidad, la fidelidad a las enseñanzas de Nuestro Señor Jesucristo y de la Santa Madre Iglesia.
Lo que los Heraldos del Evangelio hacen es SACRALIZAR LA SOCIEDAD, (que se ha perdido en medio de la decadencia de las costumbres, de la moral, ha perdido los valores cristianos), los Heraldos del Evangelio enseñan a los jóvenes el amor a Dios y a la Santísima Virgen María, nuestra protectora; les enseñan la verdadera doctrina Católica, el amor a la Santa Iglesia Católica, Apostólica y Romana…(perseguida), la adhesión afectiva y efectiva al Papado…Podría continuar, pero concluyo diciéndole que es tiempo de que recapacite, pida perdón a Dios y a quienes persigue, déjese instruir y guiar por el Espíritu Santo y tome la decisión correcta, retráctese de tanta ignominia.
Los Heraldos del Evangelio son quienes nos han formado y enseñado la verdadera doctrina de la Iglesia Católica, Apostólica y Romana. Siempre nos han enseñado a respetarla.
Han hecho que volvamos a ser miembros activos.
Ellos son hijos de una obra Divina y no humana. Nuestros hijos tienen derecho de continuar con su vocación, no permitir que continúen educándose con los Heraldos sería poner oídos sordos al llamado de Nuestro Padre Dios.
Estamos confiados en la promesa de Nuestra Señora “Su Inmaculado Corazón Triunfará “
Doy infinitas gracias a Dios por haber puesto en mi vida a los Heraldos del Evangelio puesto que a través de sus enseñanzas, testimonios y ejemplos de vida nos acercan más a Dios, nuestro Señor, a un conocimiento más profundo y completo de nuestra doctrina católica, a un amor más grande a la Virgen Santísima y a su hijo Jesucristo y a la Santa Madre Iglesia. Siento enormemente esta persecución despiadada y sin explicación contra ellos, pero confío en nuestro Señor Jesucristo y a Él elevo mis oraciones para que la Verdad salga a la luz y cese esta locura.
Un abrazo fuerte y que Dios los bendiga
Después de leer el exelente artículo de D. Marcos Tosatti, puedo afirmar que conociendo desde siempre la labor de los Heraldos del Evangelio, a quienes debo mi formación moral y espiritual, que los criterios del Cardenal Aviz, con que se pretende castigar a los niños y sus respectivas familias, no tienen fundamento ni sustento alguno que respalden su grotesca e infundada posición.
Los Heraldos del Evangelio son verdaderos instrumentos de Dios y de Nuestra Señora para la evangelización auténtica de niños y jóvenes.
Los heraldos del Evangelio catequízan a Jesús María, Santísima Trinidad, iglesia peregrina e Iglesia Triunfante de un modo bello e intachable y por supuesto de acuerdo con el Evangelio y la Tradición De la Iglesia. Esta es la forma de enseñar que hace sentirse Catolico unido al Cuerpo de Cristo y a su Cabeza el mismo Señor, que vencerá.
Mi más profundo agradecimiento a los heraldos que nos ayudan a enamoraros de Cristo y de su Madre.
Estimado Tossatti, le agradezco la publicación.
Como padre de un estudiante, me gustaría agregar cuánto estamos sufriendo por las acciones del Cardenal Aviz. ¿Cuándo terminará esto? Cuando Aviz parará esta verdadera locura. No quiere escuchar a ambos lados. ¿Por qué?
El hecho es que otro decreto injusto escrito por manos de un inicuo pasará a la historia.
Esperamos en Jesús y María que esta persecución de los Heraldos termine pronto.
Eminencia Card. Braz de Aviz, la verdad cada día sale más a la luz, no amerita ningún motivo para seguir procediendo con autoritarismo contra los Heraldos, que claramente buscan la santidad y lo demuestran en la formación y esmero por llevar la verdad.
Muy buenas tardes.
Quiero expresar mi completa molestia con la persecución que el Cardenal Bras de Aviz a realizado de un tiempo a esta parte a los Herlados del Evangelio. Sin prueba alguna ! todas las acusaciones de baja categoria que ha vociferado de norte a sur .
Además a todo su teatro de quinta ahora quiere cerrar el colegio imposibilitando que mi hija reciba la educación que soñamos para ella.
Me formé en colegio Jesuita, soy Católica Apostólica Romana.
Y me parece inaudito , injusto lo que esta haciendo Cardenal.
Atte.
Iris Aguilar M.
Pésimo e inapropiado decreto de un lamentable cardenal….
Péssimo e inadequado decreto de um lamentável Cardeal….
Soy católica Apostólica y romana. Estoy sufriendo terriblemente por todo esto que esta sucediendo.
Tengo muchos años de rezar con devoción, la oración pidiendo a Dios, “mas vocaciones, sacerdotes y misioneros santos”.
Encontrar en el año 2000 a los Heraldos del Evangelio, sentí que fue la respuesta a mis pedidos en la oración, en donde hasta mis hijos estuvieron formándose siendo niños y con todo ese fundamento de fe, completado con las prácticas en familia (también, formados en Los Heraldos del Evangelio), hoy veo en ellos todos unos hombres de fe listos para iniciar una familia y profesionales con principios que van al mundo tratando de llevar su vida como Jesús nos ha enseñado.
No comprendo como la iglesia en vez de procurar más instituciones como Los Heraldos del Evangelio, bloquean y entorpecen su trabajo. Estos son los verdaderos semilleros de vocaciones que al único que deberían estorbar, es al enemigo.
Cardenal Braz de Aviz, pido a Dios por usted, y por todos los que dirigen la Santa Iglesia, creo que hay mucha necesidad de oración, no permitamos que el enemigo dirija la iglesia, que perturbe lo que con tanto dolor, sufrimiento y amor, fundó Nuestro Señor….
Veo con mucha tristeza el sufrimiento que esto nos da, a los padres de familia, a sus hijos, sus familias…. siento pena que la Santa Iglesia, mi iglesia a la que tanto amo, la fundada por Nuestro Señor, tenga este tipo de cosas….
Hay muchos errores en el proceso, pero mi apelación es a su corazón. El demonio ocupa mucho eso que dice “Divide y vencerás. Los católicos debemos estar unidos, para vencer al enemigo, que ataca y fuerte.
Dios lo bendiga Cardenal, y le de la sabiduría para comprender el error. Esperamos con ansias su reconsideracion.
El Espíritu Santo lo ilumine Sr Cardenal Joao Bras Aviz, para que verdaderamente busque a ayudar a niños y niñas que a ya afuera el mundo los esta corrompiendo en manos de pedofilicos vestidos de ovejas y vendidos por sus propios papás. Ellos necesitan de usted su EMINENCIA. Nuestros hijos en los Heraldos del Evangelio están muy bien formados para enfrentar los desafíos que el mundo les ofrece. Nosotros como sus padres también cresemos con ellos en la fe y entrega a nuestra Santa iglesia católica anunciando así como familias el Reino de los cielos. Lo invito Sr Cardenal Joao Bras Aviz como en la encíclica del Santo padre Francisco, Fratelli Tutti!! Hermanos todos y trabajemos unidos por nuestra Iglesia Católica es el llamado que nos hace nuestro Señor Jesucristo en el Evangelio 🙏
Nadie tira piedras al árbol que da frutos. Con la claridad descrita queda en evidencia el odio que genera ser Católico, Apostólico Romano con el carisma de los Arautos.
Pido a Dios que ilumine a sus Pastores para que guíen rumbo a la verdad.
Como padre de 2 hijas de la segunda orden de Paraguay y ex miembro, del cual fui por más de 22 años.. No sólo no permito sino que tampoco puedo tolerar que alguien sin el más mínimo derecho insulte y calumbie no sólo a los heraldos del evangelio sino que mucho menos a su fundador… Hombre de intachable conducta. En primer lugar yo decido donde estudian mis hijos y en segundo lugar respeto la desicion de mis hijos donde quieren estudiar. Pues no hacerlo seria atropellar su deseo y desicion cosa que este cardenal esta haciendo con nuestro derecho como padres. Amo la santa iglesia y a ella me someto en moral y doctrina pero aquí no entra nada de eso. En mi casa ma do yo cardenal.. Y con todo respeto usted no debe y menos aun puede decirme como padre donde ellos deben estudiar como si yo no estuviera capacitado para hacerlo.
Por favor no solo me ampara el derecho canónico, sino que sobre todo el sentido común.
Gracias Dr. Marco Tosatti por publicar esta materia en su prestigioso blog. Es hora de ponerle límites a los abusos y arbitrariedades de Braz de Aviz y otros “personajes” de la curia romana, contra los Heraldos del Evangelio.
Es hora que digamos ¡BASTA! contra estos ataques injustos. También otros grupos y congregaciones son víctimas de estas barbaridades y falta de caridad fraterna.
Tal como las lecturas d rayer : cómo les molesta el Santi, el Puro, el Bueno … les molesta porque es el reflejo de lo que ellos no son. Mi apoyo total a los Heraldos del Evangelio. Conocerlos, ser parte de su familia y hacer nuestro su carisma a sido una verdadera bendición del Cielo para mi familia. Con ellos hemos aprendido a amar a la iglesia Católica, a estar a los pies de María Santisima y nuestros dos hijos con la formación recibida de parte de los Heraldos del Evangelio aspiran servir a la Iglesia, vivir su castidad y pureza . Valores que ahora el mundo no tiene. Por esto y muchísimas cosas más: gracias Heraldos del Evangelio ! Nuestra Señora está de nuestro lado, del lado de la Verdad que siempre triunfa!
Essa atitude é arbitrária e totalmente falsa. No Brasil quem abre e fecha escolas são os Conselhos Estaduais e Municipais de Educação conforme previsto na Lei de Diretrizes e Basas da Educação Nacional Lei Federal 9304/1996.
Bravo! Falou uma voz da Secretaria de Educação de Ponta Grossa – PR, autoridade no assunto!!!!
Quomodo obscuratum est aurum ! Cuánto se ha oscurecido el oro, la jerarquía eclesiástica que debería guiar y proteger al rebaño confiado por Cristo, se convierten en auténticos lobos vestidos con piel de oveja. Pero no esperaban una postura firme y decidida, ¡adelante Heraldos del Evangelio!
Alguien se preguntará… Pero como dicen eso de un cardenal elegido por Dios?. Primero no es elegido por Dios directamente, luego un cardenal, un obispo, sacerdotes, laicos, hasta el Papa pecan. Basta ver y leer bien este excelente artículo para darse cuenta la fragilidad del hombre delante de las pasiones que los llevan a cometer tremendos errores jurídicos.
Judas fue obispo, Herodes fue un juez… Parece que la historia enseña pero sólo a algunos. En todo caso, la congregación tiene la palabra…
Ottimo post, caro Marco! El ensañamiento y el descaro de las transgresiones de estos pastores inicuos encajan perfectamente con la primera lectura que la Liturgia de este domingo propone:
«Tendamos trampas al justo, porque nos molesta y se opone a nuestra manera de obrar; nos echa en cara las transgresiones a la Ley y nos reprocha las faltas contra la enseñanza recibida. Veamos si sus palabras son verdaderas y comprobemos lo que le pasará al final. Porque si el justo es hijo de Dios, Él lo protegerá y lo librará de las manos de sus enemigos. Pongámoslo a prueba con ultrajes y tormentos, para conocer su temple y probar su paciencia. Condenémoslo a una muerte infame, ya que él asegura que Dios lo visitará.» —Sab 2, 12; 17-20
Bien dice D. José Manuel “cómo es cruel constatar que en el ámbito civil todavía existe el estado de derecho, mientras que, en la Iglesia, nuestra Madre, existe una especie de estalinismo implacable”. Pero aclaremos… que ese estalinismo implacable exista dentro de la Iglesia no quiere decir que sea parte de ella, y quienes lo practican tampoco pueden serlo. Ya lo advierte claramente Nuestro Señor Jesucristo: “Cuidaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces” (Mt 7, 15); y San Pablo, haciéndose eco de esa advertencia divina, sentencia: “Yo sé que después de mi partida, vendrán a vosotros lobos rapaces que no perdonarán al rebaño” (Hch 20, 29).
Como siniestras reproducciones de Stalin y Cauchon, estos lobos vestidos de pastores se empeñan en ultrajar, atormentar y demoler a los Heraldos del Evangelio que buscan fielmente la santidad en la verdadera Iglesia de Dios. Pero estos justos guerreros de la Virgen nada temen, pues Aquella que aplastó todas las herejías del mundo, la Santísima Virgen María, Nuestra Señora, es su garantía de la victoria: “Por fin, mi Inmaculado Corazón triunfará” (Fátima, 1917).
Ellos saben que el Reino de María finalmente prevalecerá sobre este reinado inmundo de caos, iniquidad y opresión al justo. Con esta convicción los Heraldos cantan, entonando estas letras del himno mariano:
«¡De mil soldados no teme la espada
quien pugna a la sombra de la Inmaculada!»
Parabéns D Marco Tosatti pela coragem em colocar em seu site essa carta. Conheço e frequento diariamente os Arautos do Evangelho. Meus filhos participam das atividades que eles fazem com os jovens. E sou uma testemunha viva de que os Arautos estão sendo perseguidos por serem íntegros e verdadeiros. Eles são o que falam, fazem, vivem. Ou seja, são perseguidos por serem Católicos Apostólicos Romanos.
Excelente artículo, muestra claramente una animadversión de este Cardenal, (que como lo dicho en anteriores comentarios, no debió llegar ni siquiera a sacerdote), contra los Heraldos del Evangelio, y porque? Porque la presencia del justo, genera incomodidad, envidia y por lo tanto se arman celadas en torno al justo.
Pero como lo demuestra la historia, la justicia, más tarde o más temprano siempre vence, en algunos años diremos… donde está el Cardenal Bras de Aviz? Mientras que la obra de los Heraldos estarán brillando en el mundo entero
El mal rechazará constantemente donde hay bondad, tradición (buenas costumbres) y la verdad. Que mundo! en el que nos tocó vivir con una deformación de la verdad de Dios en ascenso, donde la decadencia del hombre es cada vez más palpable y el ataque es contra los más puros e inocentes; y en contra de instituciones de formación de católicos. Cuidaremos, protegeremos y defenderemos la educación de los más jóvenes, seremos garantes de mantener encendida la LUZ DE LA FE en sus almas con la confianza y bajo el amparo de la Santísima Virgen María.
El Papa Pio XII en el año 1950, durante la proclamación del Dogma de la Asunción de Nuestra Señora dijo: “La ética nueva se haya tan fuera de la ley y de los principios católicos que, hasta un niño que sepa su catecismo lo verá y se dará cuenta (Artículo La Voz de los Papas: Una falsa Concepción de la vida y de la moral. Revista Heraldos del Evangelio Num. 217, Agosto 2021).
“ Errores de los Heraldos del Evangelio “.
1-Me enseñaron a ser católico practicante.
2-Me enseñaron a amar la Santa Iglesia.
3-Me enseñaron la importancia de la eucaristía.
4-Me enseñaron a Amar a María Santísima.
5-Me enseñaron la obediencia que debemos tener al Santo Padre.
6-Me enseñaron el valor de la familia.
7-Me enseñaron a confesarme con frecuencia.
8-Me enseñaron la importancia del rezo del Santo Rosario.
Por estos errores, yo:
1-Participo en la Santa Misa todos los domingos.
2-Busco conocer más la grandeza de mi Iglesia.
3-Rezo el Rosario todos los días.
4-Busco enseñar a mi familia dentro de la moral católica.
5-Agradezco a Dios antes y después de las comidas.
6-Hago la señal de la cruz cuando paso por una iglesia católica.
7-Trato de ser el reflejo de Dios mediante las enseñanzas de los Heraldos.
8-Me Confieso todos los meses.
9-En mis oraciones, entrego todo en las manos Nuestra Señora.
Por estos y otros errores de los Heraldos del Evangelio, hoy puedo decir:
Soy católico apostólico romano.
Amo a mi Iglesia y amo a Nuestra Señora.
“Solo recibe pedradas, el árbol que tiene buenos frutos”.
Jorge Chaverri
El decreto del Cardenal Braz de Avis contra los Heraldos es una aberración jurídica y una muestra de hasta donde se puede llegar cuando el odio se apodera de alguien. No me parece exagerado compararlo con los sumos sacerdotes y sanedritas que condenaron a Jesús. Ha demostrado pertenecer a esa misma repugnante estirpe de canallas… que en su ceguera siguen cometiendo el mismo error: su persecución no servirá más que para brille más todavía la integridad y el carácter providencial de la gran obra apostólica de los Heraldos.
Totalmente de acuerdo. Como papás nos sentimos muy molestos porque somos testigos que todo esto es mentira, quiénes en verdad son las víctimas son todos los niños. A nosotros como papas nos dejan como malos padres e irresponsables. Es legítimo y válido el derecho de defensa. Gracias por su valentía y defensa a la verdad. Como sugerencia sería bueno se publicará un video de todas las actividades de los jóvenes (estudiando, rezando, jugando) y los felices que son, aclarando que ellos son las verdaderas víctimas.
Me gusta mucho la formación que los Heraldos del Evangelio, brindan a los jóvenes y discrepo lo escrito por el Cardenal Braz De Aviz.
Apoyo total a los Heraldos
Atte.
Franklin
Con todo respeto, este Cardenal nunca tendría que haber llegado siquiera a sacerdote. Intelectualmente débil y moralmente muy cuestionable a juzgar por los muy fundamentados rumores que circulan en las parroquias que tuvo a su cargo. Su vida errática le está pasando factura y en vez de convertirse al bien, prefiere perseguirlo
Conozco a los Heraldos del Evangelio y estoy segura que todo lo hacen por amor a la Iglesia y a la VIrgen… mi apoyo a los Heraldos
Gracias a D. Marcos Tosatti por permitir nós escribir cosa que en otros supuestos site católicos no se pudo.
Vemos que a muchos les molesta una orden que busca la santidad y que nos enseña amar a la iglesia , sólo cosas buenas hemos aprendido y nuestro fundador es una persona correcta intachable, con amor a Jesús ,Nuestra Señora , al papado y a la iglesia. Pero si uno no camina en la luz y en la verdad los Heraldos son una piedra en el zapato, un estorbo que hay que destruir a como dé lugar, pero ellos son una obra de Dios y de NS y no podrá destruirla. Ya han habido en otros tiempos persecuciones a las obras buenas y a sus fundadores. A como dijo Jesus dar al César lonqueies de Dios y a Dios lo que es de Dios. Las cifras de los padres felices habla por si sóla, no necesita más explicación.
Gracias a D. Marcos Tosatti por permitir nós escribir cosa que en otros supuestos site católicos no se pudo.
Vemos que a muchos les molesta una orden que busca la santidad y que nos enseña amar a la iglesia , sólo cosas buenas hemos aprendido y nuestro fundador es una persona correcta intachable, con amor a Jesús ,Nuestra Señora , al papado y a la iglesia. Pero si uno no camina en la luz y en la verdad los Heraldos son una piedra en el zapato, un estorbo que hay que destruir a como dé lugar, pero ellos son una obra de Dios y de NS y no podrá destruirla. Ya han habido en otros tiempos persecuciones a las obras buenas y a sus fundadores. A como dijo Jesus dar al César lonqueies de Dios y a Dios lo que es de Dios. Las cifras de los padres felices habla por si sóla, no necesita más explicación.
Más claro no puede ser, la animadversión y falta de sabiduría del Cardenal Aviz y la pusilaminidad del Cardenal Damaseno, digo esto con tristeza por tratarse de dos Príncipes de la Iglesia que están llamados a guiarnos, pero que se han desviado de su Camino. Dios nos ampare
Más claro no puede ser, la animadversión y falta de sabiduría del Cardenal Aviz y la pusilaminidad del Cardenal Damaseno, digo esto con tristeza por tratarse de dos Príncipes de la Iglesia que están llamados a guiarnos, pero que se han desviado de su camino.
“Si no te encuentras con el demonio de frente, es porque está a tu lado” (Santo Cura de Ars)
El bien siempre será perseguido. Y siempre vence!
Por nuestros hijos, vamos a hacer lo que sea necesario. Pero no nos dejaremos atropellar!!!
EXCELENTE ARTICULO!!! con el nivel de siempre de Marco!. Como padre de alumnas que estudian con los Heraldos del Evangelio, rechazo y condeno enérgicamente este atropello del Cardenal Braz. Ud no tiene compentencia alguna para decidir sobre la educación de nuestros hijos!. Vamos a defender con todos los medios nuestra elección por los Heraldos, donde reciben la educación que Nuestras hijas Y nosotros los padres hemos elegido. Rezo por su conversión….
¡¡¡Exsurge Deus!!!
ante tanta calumnia y persecución hacia una institución como los “Heraldos del Evangelio”, que lo único que quiere es la salvación de las almas y la implantación del Reino de María en los corazones de los fieles!
!!!EXSURGE DEUS!!!
Es nuestro “Derecho Natural” como padres escoger como y en donde educar a Nuestros Hijos.
¡¡¡La verdad prevalecerá y así como grande es la Misericordia de Dios, así también es su JUSTICIA!!!
Cuando el papa Francisco llama a los pastores a tratar con cercanía, compasión y ternura a los que están fuera de la Iglesia, qué decir del cuidado y ternura que deben tener los pastores con los que están adentro.
En oposición a lo que recomienda el papa Francisco, llega este decreto del cardenal, que trata con una violencia inusual no sólo a los Heraldos por querer decir que tiene a los jóvenes encarcelados, sino que ofende gravemente también a la totalidad de los 2583 padres de familias felices de tener sus hijos ahí, dando a entender que son unos lisiados o enajenados mentales, psicológicamente inhábiles de cuidar sus propios hijos, ignorantes afectivos y que cualquiera puede dictar órdenes sin consultarlos, una tremenda ofensa a ellos, un atropello a los deseos de vivir los jóvenes sus sueños y a los otros miles de padres que anhelamos poder formar a nuestros hijos en tan extraordinarios centros educacionales.
¿Y sostenerse con falsas declaraciones de apoderados inexistentes?
No querer escuchar lo que dicen los verdaderos tutores de esos jóvenes, a la totalidad de los padres …
¿Hasta donde va a llegar este cardenal, llamado a ser pastor almas de Dios?.
Como padre de familia que ama la Iglesia, no permito que cualquier autoridad eclesiástica, civil o de cualquier índole quiera venir atropellar mis derechos básicos como padre de familia, derechos consignados en el concilio Vaticano II, las leyes civiles y en el orden natural de las cosas.
Gracias por su artículo, me conforta ante tanta injusticia!
Totalmente inconcebible, no queda duda que lo que quieren es hacer daño a la propia Iglesia a la cual pertenecen. Una actitud definitivamente de Pilatos, al pretender hacer mal a la congregación de los Heraldos del Evangelio. Pertenecí, por casi una década y todo lo que aprendí fue amar a la Santa Iglesia Católica Apostólica Romana, y lo que se ama se defiende.
Señor Cardenal lo que Ud. está haciendo no es correcto. Lo único que ha hecho los Heraldos del Evangelio es promover la Fé Católica. Debería cambiar su desición señor Cardenal
Señor Cardenal lo que Ud. está haciendo no es correcto. Lo único que ha hecho los Heraldos del Evangelio es promover la Fé Católica. Debería recapacitar
Aprendemos amar a Nuetsro Señor Jesus y a Nuestra Madre Santisima gracias a la FE de los Heraldos ..
No promueva una persecución dentro de la misma iglesia católica
Meus filhos, minhas regras! Temos sim o direito de autorizar nossos filhos a ficar nos Arautos, sei tudo o que acontece lá, falo com minha filha todos os dias! Não acredito que a minha própria religião não quer me escutar, na pessoa de D. Braz de Aviz, não acredito que o inimigo esteja conseguindo influenciar alguns mesmo que financeiramente a lutar contra o bem! O bem que os Arautos fazem por nós, por TODA a nossa família! Quero ser escutada! Quero que não driblem e distorçam nossos direitos, direitos esses deixados por Nosso Senhor! Sou feliz por ser Arautos do Evangelho!
Meus filhos, minhas regras! Temos sim o direito de autorizar nossos filhos a ficar nos Arautos, sei tudo o que acontece lá, falo com minha filha todos os dias! Não acredito que a minha própria religião não quer me escutar, na pessoa de D. Braz de Aviz, não acredito que o inimigo esteja conseguindo influenciar alguns mesmo que financeiramente a lutar contra o bem! O bem que os Arautos fazem por nós, por TODA a nossa família! Quero ser escutada! Quero que não driblem e distorçam nossos direitos, direitos esses deixados por Nosso Senhor!
Los cristianos estamos acostumbrados a la persecución, sipersiguieron al Divino Maestro, los discípulos no pueden esperar menos, lo que realmente duele es que la persecución sea de aquellos que deberían cuidar al rebaño y no dispersarlo .
Le recuerdo al Sr.Cardenal que muchos Santos fueron perseguidos en vida y hoy brillan en los altares y sus perseguidores son solo carbones encendidos.
Un consejo al Sr.Cardenal , despida a su equipo jurídico y a sus asesores canonistas nunca vi una chapuza jurídica y canónica tan grande
Es verdaderamente lamentable ver tan claramente el odio del Cardenal Aviz por una obra tan bella como lo son los Herlados del Evangelio. Sin respeto a la ley civil, eclesiástica y moral se rompe con la familia, la tradición y la propiedad y se sigue tratando de destruir lo bueno que existe en la Iglesia.
Dios bendiga la obra de los Herlados y María Santísima la siga protegiendo! Al final el mal se devora a sí mismo.
Soy Abogado y en mi formación no había visto nunca la violacion tan desmesurada del Derecho Natural y Divino contra una Institución inmaculada e integra en todo sentido, por parte de quienes están llamados a apoyarla y defenderla. Estamos volviendo a la época de los escribas, fariseos y saduceos, que siempre buscaban en Nuestro Señor, sus apóstoles y discípulos la oportunidad para atacarlos, sin reconocer sus enseñanzas de todos conocidas.
“Pero al que escandalice a uno de estos pequeños, más le vale que le cuelguen al cuello una de esas piedras de molino que mueven los asnos y le hundan en lo profundo del mar” (Mt, 18,6 ss).
Muy mal hecho Sñor Cardenal , muy mal hecho..
Si recapacita y pide perdón públicamente, puede que Dios le perdone.
Contra un decreto del Cardenal, sin fundamento alguno legal o de hechos, era necesario un esclarecimiento realmente preclaro como el transcrito. No es posible!! que en la era “anti rigideces” no nos sea permitido a los padres la elección de la educación de los hijos. El Derecho Natural nos da a los progenitores el primer lugar en responsabilidad, bajo pecado grave.
Después de leer esta carta, nos queda la impotencia ante un Pilatos que quiere destruir la obra de Dios, en esta congregación de Heraldos del Evangelio, nuestros hijos son uno de 32 años, 31 el otro y 27 nuestra hija, y no pudo pasarnos nada mejor en la vida que los Heraldos del Evangelio nos ayudarán en su formación, que inclusive nos salpicó a nosotros como padres pues nos enseñaron a amar a la Santa Iglesia y ser católicos apostòlicos y romanos. Por esto y todo lo que ellos representan quisiéramos que más jóvenes tengan esta formación . Y defendemos la autenticidad y rectitud de los Heraldos en todo sentido.
RESPUESTA IMPECABLE!!! LE RESTA A PILATOS AHOGARSE EN SU PROPIA JOFAINA!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Em 2013, o cardeal Aviz agirmou em defesa das religiosas pró aborto e sodomia: “A autoridade que manfa, mata! E a obediência, infantiliza!”
Ora, Arautos, sigam o conselho dele: não obedeçam a um assassino, não sejam infantis…
Faltou citar mais uma personalidade histórica, como a mão na luva: Judas Iscariotis e sua bolsa de moedas que os fariseus extorquiam das viúvas e recebiam como propina dos vendilhões do templo… Se bem que naquela época, não tiveram a ideia de financiar o tráfico ilegal de armas e drogas…
Es una injusticia contra la obra de Nuestra Señora. Pero ATENCION! Que quien esta del lado de Dios tiene la certeza de la victoria. Como incomoda que los Heraldos este formando santos!!! A quien? Porque? . Tal cual el evangelio de ayer. Seguiran pagando gente para inventar calumnias contra la obra de NS? Nosotros mas de 2500 padres que formamos parte del dia de nuestros hijos efenderemos el alma de ellos hasta las ultimas consecuencias. Bienaventurados los perseguidos!!!!
Atacar a VERDADE é “dar um tiro no próprio pé”.
Assim, atualmente, parece estar sendo esmagada a cabeça da serpente: pela inteligência que nasce da santidade.
A animosidade do Cardeal é notória, mas não está sozinho. Há mãos mais poderosas maestrando toda esta perseguição descabida contra os Arautos, contra Nosso Senhor Jesus Cristo.
Uma ditadura comunista, é o que estão praticando o Aviz e afins. Onde já se viu querer impor aos pais onde educar seus filhos! Num mundo onde se dizem a favor da liberdade de escolhas… francamente, só não vê que isso é ódio contra Deus quem não quer!